WOW by Adriana

Just another WordPress.com site

Mayra Vélez

Arte en toda la extensión de la palabra

Por Adriana D’Angelo.

Artista plástica, diseñadora de joyas, maquillista profesional de cine, televisión, fotografía y teatro, Mayra Vélez vive y practica el arte en toda la extensión  de la palabra. “Yo considero que el arte es la vida misma, lo necesitamos para todo lo que hacemos, si estás casada tienes que  llenar de arte tu convivencia para mantener el matrimonio, y así con todas las actividades diarias que realizamos”, comentó.

Mayra Vélez es originaria de Santo Domingo, República Dominicana. Desde el año 2004 reside en la ciudad de Fort Myers junto a su esposo Denis Vélez, también artista plástico y con quien ha estado casada por 25 años. Ambos  se han autodenominado “La Pareja Artística”, y participan muy activamente en el movimiento cultural del área.

A Mayra el arte le corre por las venas, porque su madre era pintora, al igual que su hermano, y su bisabuelo era compositor músico. Desde muy joven ha estado involucrada con el mundo artístico, en la década de los ochenta trabajó como maquillista y estilista de celebridades, figuras de la realeza europea y el jet set, e incluso para los actores de películas del reconocido director Sydney Pollack.

A pesar  de que siempre ha sentido una inclinación por la producción artística plástica, la crianza de sus hijas Danielle y Nadege la alejaron por un tiempo de los lienzos y pinceles.  En el año 2001, cuando ya comenzaba a sentir los síntomas del nido vacío, pues ya sus hijas estaban grandes e independientes, decidió retomar sus creaciones pictóricas.

“Mi estilo artístico se inclina hacia el impresionismo, pues no pretendo plasmar la realidad tal como es, sino expresarla de la manera en que la percibe mi imaginación” explicó Vélez, quien utiliza en sus obras generalmente colores vivos, en  pastel, acuarela, pastel de aceite, óleos, etc.  Admira el estilo de la pintora Americana Mary Cassatt, quien delicadamente hizo retratos de mujeres y niños en pastel.

Actualmente Mayra ha estado explorando una nueva faceta de creación artística, se trata del diseño y confección de joyas originales, en las que utiliza diversos materiales, entre ellos, piedras semipreciosas, perlas cultivas, canutillos, cuero, cuentas de madera y de cerámica, entre otros. “Tengo una nueva línea de joyas verdes o ecológicas, para las cuales uso productos que son amigables con el medio ambiente”, agregó Vélez.

Recientemente realizó un show para exhibir sus creaciones en el condado de Lee y tubo una excelente receptividad, sobretodo por cada pieza que diseña es original, y quien la adquiera no encontrará otra igual en la calle. Los precios de las joyas oscilan entre los 25 y 200 dólares.

Para mayor información sobre Mayra Vélez y sus piezas artísticas, visite: www.denis-mayra-artwork-productions.com.

A la par de la pintura y el diseño de joyas, Mayra continúa incursionando en el área de maquillaje, y trabaja en el mostrador de la prestigiosa marca Lancome, en el Edison Mall de la ciudad de Fort Myers. “Esta es otra manera de manifestar mi arte. Cada rostro que maquillo es como un lienzo para mí, es una nueva oportunidad de expresar el producto de mi imaginación. La gente se  sorprende de la facilidad con la que puedo mezclar y combinar los colores de la paleta de maquillaje, pero eso es algo que está intrínseco en mí, es una habilidad con la que nací”, afirmó.

Mayra realiza maquillajes para desfiles de moda, fotografías profesionales, bodas y eventos especiales. Actualmente forma parte del equipo de estilistas de D’Latinos Magazine, para las sesiones fotográficas de las portadas y editoriales de moda.

Cuando Mayra no está produciendo alguna pieza artística o maquillando a alguien,  invierte su tiempo libre en el cuidado de su adorado nieto, o se sumerge en la lectura, “me gusta mucho leer sobre arte, sobre la vida de otros artistas importantes de la historia de la humanidad, y también soy seguidora de los libros de auto-ayuda o crecimiento personal”.

Mayra Vélez opina que en el área del Suroeste de la Florida hay mucho talento artístico, sobretodo entre los hispanos, quienes han conformado un estupendo grupo, con el que ella y su esposo Denis, comparten frecuentemente en exhibiciones y eventos culturales, “Pienso que definitivamente hace falta mucho más apoyo por parte de nuestra comunidad, la gente debería apreciar nuestro esfuerzo, y asistir a las invitaciones que les hacemos. Te aseguro que si inviertes tu dinero en arte, será mucho mejor, y más lucrativo que hacerlo en Wall Street, porque nunca vas a perder tu inversión, sino que por el contrario, esta cada vez tomará más valor”.

Leave a comment »

Jonathan Green

Por Adriana D’Angelo.

“Considero que el arte es la esencia de la vida”

 

“El arte siempre ha estado entre nosotros. Antes de que existiera algún lenguaje escrito, las imágenes de la vida cotidiana se plasmaban en las paredes de las cuevas, dejando allí grabada la historia misma y los detalles efímeros de la vida cotidiana. Mi trabajo plástico está enfocado en proyectar a la mujer y a la figura humana en general realizando las actividades del día a día, especialmente en escenarios rurales, que es de donde yo vengo. Considero que el arte es la esencia de la vida”

 

Jonathan Green es un artista y coleccionista de obras de arte reconocido a nivel nacional. Reside en la ciudad de Naples, Florida desde hace 26 años. Con un amplio conocimiento del arte en todas sus expresiones, adquirido de manera académica y empírica, ha hecho de su residencia un variopinto museo con valiosas piezas pictóricas y escultóricas de artistas de diversas partes del mundo. Además, desde hace un par de años funciona su galería en el área de Bayfront, donde exhibe sus creaciones propias y también el trabajo de jóvenes talentos locale

Green nació en Carolina del Sur y se crió en medio de un ambiente rural. Recuerda que desde pequeño el arte ha sido su pasión, e incluso en la escuela, solía cobrarle a sus amigos por los dibujos que hacía. A través de los años ha seguido arraigado personal y artísticamente a sus herencias afro-americanas, es por eso que esa tendencia es la que predomina en sus obras. 

Después de graduarse en el Beaufort High School, sirvió en la Fuerza Aérea Norteamericana como ilustrador, y más tarde estudió diseño de textiles en el East Grand Forks Technical Institute  de Chicago. En 1970 inició sus estudios formales de dibujo y pintura en el School of the Art Institute  de Chicago, recibiendo su título de arte a principios de los ochenta.

Mientras estaba en Chicago conoció a su compañero y actual representante artístico, Richard Weedman, quien hizo posible su expansión intelectual a través de numerosos viajes por el mundo, que le ayudaron a ampliar su visión artística.

Durante todos sus años de intenso trabajo artístico, Green ha reflejado en sus obras todos esos sueños, recuerdos e indelebles imágenes que quedaron grabadas en su memoria durante la época de la niñez. “Yo no pinto a partir de fotografías, mis cuadros surgen de la imaginación y son recreados por mis manos a través del pincel”, apuntó el artista.

La obra de Green presenta una mezcla de realismo, cubismo, expresionismo, impresionismo y surrealismo. El define su trabajo como el resultado del amor, y de la visión que él tiene acerca de la vida cotidiana, de lo que el hombre ha hecho a través del tiempo y que se transmite de generación a generación por medio del arte.

Hablando como coleccionista de arte, Green asegura que es capaz de sacrificar cualquier cosa por comprar una obra de arte, porque adquirirlas se ha convertido en una especia de vicio que no puede controlar. “Para mi lo más importante al comprar una obra es conocer al artista que la creó, pues la pintura o escultura adquieren más valor cuando converso con su realizador y me explica en qué se inspiró para hacerla”.

Jonathan Green está vinculado activamente con diferentes causas sociales, tanto a nivel local como nacional. Constantemente ofrece charlas para niños y jóvenes en escuelas, museos y bibliotecas. En marzo de 2008 se celebró en Charleston la Semana de Jonathan Green, con diversas actividades artísticas, en reconocimiento a la contribución de este afro-americano en el rescate y conservación de la cultura propia de esa área del país.

Las obras de Jonathan Green pueden encontrarse en museos de California, Florida, Georgia, Carolina del Norte, Oregon, Pennsylvania, Carolina del Sur y Vermont. 

Leave a comment »

Marie – Anne Sabourin

Figurativa – Expresionista – Contemporánea

Por Adriana D’Angelo

Marie-Anne Sabourin nació en Medellin, Colombia, en el seno de una familia artística. Comenzando por su abuela materna, quien era poeta, su abuelo paterno y su padre con talento para pintar, un tío actor de teatro, y su madre, Lucy Correa, quien es una reconocida pintora y escultora colombiana.

Emigró a los Estados Unidos en Junio del año 2000, luego de culminar sus estudios de Diseño Gráfico en la colegiatura colombiana de diseño. A pesar de que no ha tenido ninguna preparación académica formal en el área artística recuerda que desde pequeña siempre se ha sentido atraída por los colores y las artes manuales, de tal manera que con un talento que le viene de herencia y mucha práctica, ha ido mejorando sus creaciones de manera empírica.

Marie-Anne define su estilo artístico como figurativo expresionista contemporáneo, con énfasis en el diseño gráfico. Confiesa que siente una atracción especial por los peces, cuya belleza, diversidad de colores, formas  y mínimos detalles le impactan de tal manera que se convirtieron en los primeros elementos que plasmó en el lienzo y continúan siendo imágenes recurrentes en sus posteriores creaciones.

 

Respecto al target al que van dedicadas sus obras, Marie-Anne comentó: “Mi arte es muy juvenil, sin embargo no quisiera limitarlo a un grupo de gente, pues el propósito de mis obras es hacer sonreír a quien las vea, y muchas veces revivir a ese niño que todos tenemos dentro. Lo más importante para mí es que mis obras proyecten un mensaje de vida, amor, esperanza, alegría, sentido del humor y buen gusto en la moda, es por eso que mis cuadros pueden colgarse tanto en el cuarto de una niña, como en un hotel, una galería o en la sala principal de una casa”.

Los cuadros están pintados en acrílico sobre lienzo, y en ellos mezcla diversas técnicas y materiales como el pastel, los cristales, piedras brillantes, escarchas, aerosoles, tinta china, etc. “Siempre estoy experimentando con materiales diferentes hasta obtener los resultados que busco, porque me encanta que mis obras tengan elementos tridimensionales”, agregó la artista. 

La fuente de inspiración de los cuadros de Marie-Anne Sabourin está enfocada en la mujer actual, moderna, “chic”,  joven y divertida. Aunque confiesa que algunas veces ha pintado a su propia hija Emiliana, a su hermana Veronique y a muchos otros miembros de su familia.

“Estoy felizmente casada desde hace 8 años con Juan Carlos Quiceno, con quien tengo dos lindos hijitos: Emiliana de cinco años y David de 22 meses”, comentó acerca de su vida personal.

Marie-Anne nunca se había propuesto ser pintora, asegura que pinta porque le apasiona y porque siente la necesidad de crear cosas con sus manos. Sin embargo agradece a Dios los dones y talentos que ha recibido y que puede emplear para hacer sonreír a otras personas. “Mi meta es seguir creando, evolucionando, aprendiendo…  considero que soy multifacética y quiero materializar todas las ideas que pasan por mi mente, pero sobretodo, quiero que mis creaciones se distingan por el mensaje positivo que yo deseo transmitir a través de ellas”.

Esa mezcla de colores en los cuadros de Marie-Anne Sabourin, sirve más que para decorar un espacio, para levantar el ánimo en un mundo en el que estamos acostumbrados a oír malas noticias y a ver mensajes distorsionados de lo que realmente es la esencia de la vida.

 

Leave a comment »

William García

Ornamentos de la tierra

Por Adriana D’Angelo

Semillas, bambú, escamas de pescado, madera, cáscaras de naranja, cerámica, metales, coco, cuero y muchos otros materiales de múltiples colores son los componentes esenciales del trabajo del artesano William García, quien, a través de un minucioso trabajo manual y mucha creatividad, es capaz de crear pequeñas y auténticas piezas de arte, destinadas a complementar el look de mujeres y hombres de cualquier edad, tendencia o estilo de vida.

La tendencia Hippie de William García viene de Bucaramanga, Colombia, su tierra natal, donde un amigo le enseñó muchas de las técnicas que hoy aplica para crear las joyas artesanales que se han convertido en su principal sustento. “Al principio comencé a hacer esto por hobbie, pero luego fui ampliando mis conocimientos, intentando hacer nuevos diseños y observando el trabajo de otros artesanos, y ahora prácticamente vivo de eso, aunque aquí en el área es muy difícil conseguir lugares donde pueda exhibir mi trabajo”, comentó el joven de 21 años.

Guiado por su creatividad, William ha creado una amplia colección que incluye: collares, aretes, pulseras, brazaletes, relojes y todo tipo de “guindachos” tanto para mujeres, como para hombres. “Yo tengo una colección muy variada de materiales, texturas, diseños y colores, por eso es que mis accesorios los puede usar todo el mundo”, dijo García, quien se presenta como un “artesano andino”.

Muchos de los materiales que utiliza son exportados desde Colombia y otros lugares de Latinoamérica, pues los precios locales de estos materiales son muy elevados.

William García emigró a los Estados Unidos junto a su familia en el año 2000, y aquí terminó su bachillerato (High School). En el 2005 los García volvieron a Colombia y él se quedó por un tiempo más hasta que fue a reunirse con ellos. Volvió nuevamente a la ciudad de Naples a finales del año 2007, dispuesto a comercializar en la Florida los trabajos que aprendió a hacer con sus amigos buhoneros de Colombia durante el corto periodo de su regreso.

Actualmente expone en diferentes puntos estratégicos del Suroeste de la Florida sus diseños propios y también los trabajos de algunos colegas artesanos de su país natal. Es muy probable que un día cualquiera se lo encuentre por allí cargando con su taller itinerante y sus multicolores creaciones.

Leave a comment »

Reynier Llánes Márquez

Inspirado por la libertad

Por Adriana D’Angelo 

Diecinueve horas transcurrieron antes de que Reynier Llánes pisara suelo norteamericano, luego de salir clandestinamente de Cuba, a bordo de una lancha rápida, junto a un grupo de desconocidos. Cincos intentos frustrados retrasaron, por un tiempo, su salida inminente en búsqueda de la libertad. Mientras tanto, producía obras de arte, con un estilo que se fue perfeccionando a fuerza de dedicación, estudios, lecturas rebuscadas y mucha práctica.

Han pasado pocos meses, pero aún se ve en su mirada un halo de nostalgia, por todo lo que dejó y por la incertidumbre del presente en un territorio totalmente desconocido. Como buen artista, ha aprovechado la ventaja innata de expresar sus sentimientos encontrados a través del pincel y los colores del óleo sobre el lienzo. Balsas, agua del mar, azul del cielo y mujeres del trópico, son algunos de los elementos reiterativos de su obra.

Reynier LLánes Márquez nació en Pinar del Río, Cuba. Se educó como maestro de artes plásticas y ejerció su profesión por un par de años en una escuela local. Vivió un tiempo en La Habana, capital cubana, donde tuvo la oportunidad de visitar los museos más importantes de la isla, conocer a otros colegas artistas y absorber la mayor cantidad de información posible, con el objetivo de perfeccionar su técnica pictórica.

Actualmente reside en Lehigh Acres y tiene su estudio-galería en el área central de la ciudad de Naples, el cual inauguró recientemente en sociedad con su manager Daniel Linehan.

Llánes recuerda que inicialmente se inclinaba hacia el estilo impresionista, pero en el camino conoció al pintor realista Juan Miguel Suárez, quien se convirtió en el tutor que le ayudó a moldear y perfeccionar su trabajo. A partir de ese momento, sus pinturas tomando un rumbo diferente, mostrando así una adaptación del realismo clásico a las tendencias del mundo contemporáneo.

Puede conocer más sobre su obra en: www.reyarte.com

En las pinturas que elaboró aún en tierras cubanas, utilizando óleos sobre lienzo, Reynier Llánes, expresa todos los deseos de libertad reprimidos durante años. La serie que tituló “Extrañas visitas” muestra tácitamente todo el proceso que debió pasar antes de tomar la balsa que lo sacó del encierro comunista. El conjunto de pinturas cierra con la obra maestra del novel autor (junto a la cual aparece en la fotografía principal) titulada: “Fe y conciencia de sobrepeso”, donde muestra una balsa en el medio del mal, sobre la que descansa un grupo de plátanos, que simbolizan a los balseros y una imagen de la virgen de la Caridad del Cobre, representando la fe, única compañera de los viajeros.

Otro de los temas que aborda Llánes en su obra es la separación que sufren las familias, cuando algún miembro decide emigrar de la isla. Actualmente trabaja en una serie de mujeres que demuestra la tristeza mezclada con esperanza de quienes se quedan esperando. Algunas de las piezas de dicha serie presentan a la figura femenina con toques profundos de sensualidad, sobre lo cual el artista expresa: “No quiero convertir mi arte en algo pornográfico, mi deseo es transmitir el potencial de la mujer en todos los ámbitos de la vida actual”.

La carrera de Reynier Llánes tiene un futuro prometedor, con tan sólo 22 años ha logrado una definición magistral de su estilo y se prepara para cautivar las miradas de los amantes del arte a nivel internacional.

 

Leave a comment »

José María Castillo

Retratando la perfección

Por Adriana D’Angelo

Con su aspecto tranquilo, relajado y equilibrado, José María Castillo no aparenta ser el artífice de unos retratos creados en óleo, que emulan la perfección en cuanto a la proporción, expresión y realismo se refiere.

Sentada, tomando una taza de té de menta, examiné todo el espacio que abarca su estudio de pintura, ubicado en el área de los Estates en la ciudad de Naples, donde definitivamente, a pesar de asombrarme por el orden y la pulcritud, encontré rastros de arte: un caballete, muchos lienzos terminados y sin terminar, papeles, blocks de dibujo, cartones y algunas gotas de pintura. Lo más fascinante fue ver los rostros perfectamente creados, reproduciendo la realidad con tanto detalle que parece estar viendo la escena en vivo.

José María Castillo nació para ser artista, por eso incluye el arte en cada uno de los aspectos de su vida. Desde niño pintaba, pero comenzó a tomar conciencia de sus dotes artísticos cuando entró a la Escuela de Arte de Lima, Perú, su país de origen. Allí comenzó una carrera que ha significado su vocación y su forma de ganarse la vida.

“Yo siempre creí que era pintor, sin saber que lo era, sin saber incluso pintar”.

Muy joven se muda a la ciudad de Nueva York, pues pensó que allí podría entrar en contacto con sus dos pasiones: la pintura y la música. Definitivamente escogió el lugar perfecto. La gran manzana le ofreció un abanico de posibilidades en cuanto a la preparación artística y también le dio la oportunidad de conocer y entrar en contacto directo con los grandes exponentes de la música de los 70’s y 80’s, los salseros de todos los tiempos, que en aquella época enloquecían a las multitudes neoyorquinas.

Vivió 15 años de su vida en Nueva York, allí se preparó en las mejores academias de arte como: “The Art Students League of New York”, “Parsons the New School for Design” y el “Fashion Institute of Technology (FIT)”, entre otros. Inicialmente se dedicó al diseño grafico, luego trabajó como ilustrador, y sus creaciones fueron publicadas semanalmente en los periódicos más prestigiosos del país.

Su profesión le permitió entrar en el mundo de la moda y las artes, tratando codo a codo a figuras importantes y trascendentales, como el es caso de Erte, el precursor del Art Déco, con quien aparece posando en la foto tomada aproximadamente en los años ochenta, cuando el veterano celebraba su cumpleaños número noventa. 

En un momento inesperado, Castillo dio un vuelco total a su vida y decidió que se dedicaría a la creación de retratos. Luego de intensos estudios, se sentía suficientemente preparado para entrar al mundo de la pintura y a eso se ha dedicado hasta la actualidad.

Desde hace 10 años reside en la ciudad de Naples junto a su esposa Ivette Gómez y a sus dos hijos, Frank y Augusto, quienes han heredado algunas de las cualidades artísticas de sus padres. Comenta que se siente muy a gusto en la ciudad, pues hay un buen movimiento artístico y se vive con mucha tranquilidad. Antes de mudarse a Naples vivió un tiempo en Puerto Rico, donde desarrolló al máximo su trabajo artístico.

“Mi obra está influenciada por artistas importantes del siglo XVII como Frank Hols y Velásquez, y otros grandes artistas ingleses del siglo XIX”. En sus obras destaca la perfección en la proporción y la similitud de los personajes con los sujetos reales. Para sus creaciones utiliza el óleo, el carboncillo y las acuarelas sobre el lienzo.

“La técnica me ha costado mucho trabajo, tiempo, práctica y estudio”, y esa preparación se evidencia en el rostro de un cliente complacido con el trabajo recibido, bien sea personal o para algún miembro de la familia.

Actualmente José María Castillo imparte clases grupales en el Centro de Arte Von Liebig, ubicado en el downtown de Naples, y también clases privadas en su estudio. Comenta que tiene alumnos de todas las edades, algunos son empresarios retirados, otros son artistas que necesitan perfeccionar su técnica en la elaboración de retratos. Admite que su especialidad es enseñar paso a paso la aplicación de las proporciones, las cuales domina con mucha seguridad tras años de experiencia.

“Muy pronto voy a comenzar una nueva etapa en mi carrera artística. Sin dejar a un lado los retratos, voy a romper con todo lo que he hecho hasta el momento, voy a negar todo lo que me ha caracterizado en mi obra artística, voy a descomponer la forma para entrar en el mundo de la abstracción”, de esa manera podrá dar rienda suelta a la espiritualidad y a las emociones.

A la par de su inspiración artística, Castillo mantiene la espiritualidad como la base de su vida. Desde hace muchos años practica el yoga y trata de vivir en armonía y unión consigo mismo y con el entorno. Por eso piensa que mientras no tenga pendiente la producción de algún retrato, dedicará su tiempo a pintar cuadros abstractos, donde expresará todo ese cúmulo de sentimientos que tiene guardados en su ser.

“Si no hubiese sido artista, quizá sería bailarín o músico porque tengo buen oído”, comentó el pintor de origen peruano. Además afirmó que la cocina y el fútbol soccer son algunos de sus otros placeres, los cuales practica regularmente.

Conozca más sobre la obra de José María Castillo en: www.prtraits.com/castillo


Leave a comment »

David Acevedo

Sentimientos de colores

Por Adriana D’Angelo

<< “Yo trato de pintar con honestidad, cuando pinto algo es porque me viene del alma, si las personas no entienden exactamente el mensaje que yo envié, no importa, por lo menos ya lo saqué de adentro. También juego mucho con la sorpresa, me gusta que la persona reciba de mí cosas inesperadas. He tenido dos perdidas grandes en mi vida y la pintura me ayudó a entender lo que había pasado en ambas.>>

 

En un estudio sumamente organizado – para  su profesión – y repleto de obras de arte de su autoría, David Acevedo da rienda suelta a su imaginación, expresando palabras, logros, dudas, preocupaciones y todo tipo de sentimientos a través de miles de colores.

Define su trabajo como el máximo catalizador de sus emociones, como un elemento equilibrante en su vida, tanto en los momento de felicidad como en sus peores días de soledad. Desde el punto de vista artístico, se ubica en la corriente expresionista, con tendencia al mismo tiempo a la figuración y la abstracción. Sin embargo se niega a encasillar su obra dentro de un estilo definido, pues, al igual que muchos otros artistas contemporáneos, apuesta por la libertad y la ausencia de barreras en el proceso creativo.

De acuerdo a lo que le dicta su memoria, desde que tiene uso de razón ha pintado. Desde sus trazos infantiles ha ido moldeando sus técnicas, pasando por distintos estilos – entre ellos el surrealismo – hasta llegar a esas obras de arte que muchos atesoran en lugares especiales de la casa o la oficina.

Al preguntarle cual era su color favorito respondió categóricamente y sin pensarlo: “todos”, lo cual se evidencia claramente al echar un vistazo colectivo a sus trabajos. Quizás esa tendencia pintoresca le viene de herencia de su tierra natal, Puerto Rico, de donde emigró hace ocho años para internarse en suelo americano.

Conoce más sobre su obra y biografía en: www.acevedostudio.tripod.com

En el año 1993 recibió un título como Licenciado en Arte por parte Recinto de Mayagüez de la Universidad de Puerto Rico y afirma que en ese momento fue cuando comenzó profesionalmente su carrera artística. Dice que si de alguien heredó la vena artística fue de su padre, quien siempre ha pintado pero nunca de manera profesional, por otra parte, la tendencia al uso desmedido de los colores piensa que fue el legado de su madre. 

Se mudó a los Estados Unidos, específicamente al Suroeste de la Florida, porque consiguió un empleo en las oficinas del Seguro Social en la ciudad de Fort Myers. Allí sigue trabajando tiempo completo como “Technical expert”, pero trata de dedicar todo su tiempo libre a su verdadera pasión: el arte.

Afirma que su sueño es poder algún día mantenerse sólo con su trabajo artístico, tener su o “sus” propias galerías y lograr que, tanto su obra, como su nombre, sean tan reconocidos que pueda firmar una servilleta y darle a ésta un valor millonario, así como pasó en la historia de otros grandes como Pablo Picazzo.

Su casa ubicada en la ciudad de Cape Coral, al igual que su muestra pictórica, está llena de colores. Todas las paredes tienen tonalidades diferentes y en ellas cuelgan obras de artitas locales e internacionales, tales como: Bruce Holwerda (Illinois, US.), Schluss (Israel), Antonio Martodel y Carlos Irizarry (ambos de Puerto Rico). 

Leave a comment »

Yohann García Hernández

Paisajes que cobran vida

Por Adriana D’Angelo

Verdes, amarillos, azules y rojos, en todas sus tonalidades, son los colores que predominan en los paisajes naturales que surgen de las manos de Johann García, un joven pintor de origen cubano, que recrea de manera casi real las bellezas de la flora y de las aguas de su isla caribeña.

 

Nacido en la Havana, García se graduó en la Academia de Artes Plásticas de San Alejandro en el año 2001, pero considera que su formación ha sido en parte autodidacta. Se puede decir que su vida ha transcurrido en medio de pinceles, óleos y lienzos, pues a pesar de haber tenido una educación formal académica, recuerda que desde muy niño siempre le gustó pintar, sin embargo no tomó consciencia de su instinto artístico hasta que tenía cerca de los 14 años.

A diferencia de otros artistas jóvenes que han sido inspirados por sus padres, fue Johann quien despertó el deseo de pintar en su padre, Basilio García, quien actualmente también se dedica a la creación de obras pictóricas.

El arte no sólo ha sido su pasión y entretenimiento, recientemente también se convirtió en su pasaporte para emigrar a los Estados Unidos. Llegó a la ciudad de Naples hace 4 meses, y durante  su estancia ha recibido el apoyo de su tío René, con quien vive actualmente.

Aquí a creado su propio estudio donde puede concentrarse y pintar con mucha tranquilidad, éste se ha convertido en una especie de nido en el que también hay lugar para rememorar los viejos tiempos. Al hablar de Cuba, la tierra que lo vio crecer, aún se ve en su mirada un sentimiento de nostalgia, sobretodo al recordar a la hermosa hija que dejó en la isla. Andrea María tiene 5 años y hace poco comenzó la escuela.

Las obras de Johann García no son simples paisajes que surgen de su imaginación, son una copia fiel de escenarios naturales reales de Cuba. Los árboles, flores y lagos que salen de su pincel existen en la realidad y son traducidos por la mente del artista y plasmados con tanta perfección en sus colores, formas y sombras que, en ocasiones, parecen ser fotografías o copias fotostáticas en lugar de óleos sobre lienzos.

A la corta edad de 30 años, García ya ha participado en varias exposiciones colectivas en Cuba y en otros países como: Estados Unidos, Canadá, Francia, México y Panamá. En la actualidad sus obras están siendo exhibidas en Coral Gables, Canadá y Paris (Francia). Además ha recibido numerosos premios gracias a su trabajo artístico.

Johann aún se adapta al sistema norteamericano, pero se considera afortunado de estar en un país lleno de libertades y oportunidades, quiere dar a conocer su arte y la manera más especial que tiene de comunicar sus sentimientos y su percepción de la vida. Comentó que “cuando el ser humano no tiene esperanzas, la vida carece de sentido”, pero ahora él está lleno de sueños y esperanzas que apuntan a un mejor porvenir.

Leave a comment »

Marialba Amengual

Instinto y Abstracción

By Adriana D’Angelo

Proveniente de una familia de artistas y motivada por su carrera profesional, el diseño de interiores y exteriores, Marialba Amengual ha convertido la abstracción en la fuente artística que le permite expresar sus sentimientos y deseos más profundos.

Llegó hace 13 años a los Estados Unidos, convirtiendo a la Florida en su morada. Por cosas del destino, hace siete años se tomó en serio la idea de que sus manos eran capaces de producir arte, pues a pesar de que desde muy pequeña los colores, creyones, acuarelas, pinceles, lápices y papeles eran sus mejores amigos, hasta el momento no había analizado sus pinturas con ojos de artista.

En aquel entonces y gracias a la intervención de una buena amiga llamada Beatriz Prado, Marialba consiguió en si misma el talento que admiraba en otros, cuando hojeaba los libros y revista de arte, diseño o decoración. Una vez reconoció esa fortaleza, presente desde sus primeros años de vida en la capital de Venezuela, su país natal, convirtió el poder de pintar en la expresión de sus experiencias, sueños nocturnos y creencias espirituales.

Marialba Amengual recuerda que esa etapa de la vida en la que comenzó a pintar formalmente sobre los lienzos, coincidió con su despertar espiritual, el momento en el que descubrió que debía cambiar de rumbo para comenzar a concentrarse en cosas verdaderamente importantes. Es por eso que define sus obras como la expresión de su interior, una imagen dictada por el corazón.

El estilo de esta artista venezolana es Abstracto, y al observar su muestra en conjunto se pueden notar dos vertientes. Un abstracto no figurativo, hecho a base de trazos desiguales, colores, valores y texturas, y otro abstracto figurativo, de onda muy contemporánea, donde los círculos, cuadrados, triángulos y rectángulos son los protagonistas.

“La abstracción es algo que sale del alma, no se basa únicamente en hacer pinceladas al azar, cada elemento, con forma definida o no, tiene un sentido propio que desea expresar algo”, dice Marialba, defendiendo su apreciación de que lo figurativo es una copia, un calco de la realidad visual, mientras que aquello que no tiene forma es la expresión de los sentimientos, que son invisibles e impalpables.

Las obras de Marialba Amengual tienen targets muy variados, quienes compran sus pinturas pueden ser estudiantes solteros o una pareja de adultos contemporáneos, pues sus cuadros encajan armoniosamente en una habitación infantil, en una sala estilo barroco o en un comedor completamente minimalista, así que cualquiera que sea tu decoración, si te gusta la abstracción, en la muestra de esta joven artista hay algo que se parezca a ti.

“Muchas veces mis clientes me encargan obras con formas, colores y texturas definidas, pues ya tienen una decoración establecida, mientras que otros al ver alguno de mis cuadros se deslumbran de tal manera, que cambian todos los muebles y la decoración en función de que estos combinen con la pintura”.

Su fuente de inspiración son las cosas cotidianas, los sentimientos. En ocasiones sueña con alguna imagen y al levantarse lo pinta en el primer papel que encuentre, a manera de borrador, para que no se le olvide y luego pueda llevarlo al lienzo. “Si me esfuerzo mucho por crear algo específico o que me hayan encargado, lo más probable es que consiga pintar todo lo contrario”.

Su color favorito es el rojo, símbolo de pasión y de poder, mientras que su forma geográfica predilecta y más recurrente son los círculos, a los cuales define como símbolos de unidad y de totalidad, que encierran todo el universo. El acrílico será el pigmento que más verá al observar su obra.

“Mi hijo Federico y mi cuñada Marianne son mis más grandes admiradores, y mis mayores críticos también”, afirma Marialba, pues una vez concluye sus cuadros los somete a los ojos y comentarios de sus familiares, quienes son los que le auguran el éxito posterior ante las miradas de terceros.

1 Comment »

Amarilis Véliz Diepa

Pinceladas de Libertad

Por Adriana D’Angelo

Comenzó su incursión en el mundo de la pintura a la corta edad de 12 años. En aquel tiempo nunca se imaginó que lo que comenzó como una simple afición se convertiría en la pasión de su vida, y no sólo eso, en las alas que le permitirían, más adelante, volar fuera del encierro impuesto por el régimen castrista en su país natal, Cuba.

Amarilis Véliz Diepa nació en Las Tunas, Cuba, y allí vivió, se preparó académicamente y reprodujo su arte hasta el año 2006, cuando decidió exiliarse y comenzar una vida donde su trabajo sería completamente libre.

Estudió en la Escuela Nacional de Arte Cubanacam en la Habana, Cuba, posteriormente recibe postgrados en Diseño Industrial y Arte Contemporáneo, así como cursos de adiestramiento en fibras y diseños textiles.

Por encima de toda esa preparación formal, siempre prevaleció el talento innato que la hizo destacarse inicialmente entre sus colegas coterráneos, y luego a nivel internacional. La obra de Amarilis Véliz se caracteriza por un estilo Surrealista Mágico, y está cargada de simbolismo, pues cada pintura o tapiz surgidos de sus manos bajo la opresión del comunismo, traen consigo algún mensaje de liberación, pinceladas de esperanza por un futuro libre de opresión.

Utiliza materiales tan diversos como la madera, cerámica, alambres de púas, latas, recortes de periódico, telas, encajes y todo cuanto sintonice con la obra que tiene en mente, mezclándolos en el lienzo con óleos, acrílicos, acuarelas y pasteles.

La primera vez que salió fuera de Cuba fue en el año 2001, cuando su obra ganó un concurso patrocinado por las Naciones Unidas, cuyo premio principal era un viaje a Italia, que incluía lo más importante, el permiso para salir de la isla. Al tener la oportunidad de experimentar otras culturas se dio cuenta de que existían otras formas de vida, y comenzó a disfrutar del beneficio de la libertad de expresarse de hacer lo que quisiera, sin tener que agradar a nadie. La estancia que estaba supuesta a durar dos meses, se extendió a más de dos años, en los cuales su obra fue exhibida y elogiada por miles de personas en las más prestigiosas salas de arte de Europa.

Volvió a Cuba, pero su mentalidad había cambiado, por lo que comenzó a planear su partida. A principios del año 2006, recibió una invitación para pintar un mural en México, y la aceptó, llevándose a su esposo Waldemar Morales como representante. Estando en México pasaron la frontera hacia los Estados Unidos y se asilaron. Desde entonces viven en la ciudad de Fort Myers, donde han comenzado una nueva vida.

La historia de esta pintora cubana confirma que el talento y la dedicación son grandes armas para salir adelante. Es increíble pensar que aún viviendo toda su vida bajo el encierro comunista, su obra ha participado en más de sesenta exposiciones colectivas internacionales. Actualmente hay pinturas de su autoría exhibidas en Cuba, Italia, Francia, República Dominicana, Alemania, España, Perú, República Checa, Bélgica, Japón, México y los Estados Unidos.

Amarilis Véliz afirma que “su único compromiso en la vida ha sido con su obra”, y que en cada cuadro lograba representar lo que no podía decir con palabras, respaldada por el hecho de que cada persona tiene la libertad de darle el sentido que quiera a las manifestaciones artística.

Esta cubana inspirada por el compromiso que tiene como artista de dejar un legado a las generaciones futuras ha logrado hechizar a los más sofisticados críticos de las artes plásticas, consiguiendo reconocimientos tan importantes como: el Premio Internacional Beato Angélico del Vaticano (Junio, 2003); el Premio de Escultura en el Festival Mundial de la Educación y la Cultura de San Remo, Italia; y el Primer Premio del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas en Cuba, entre otros.

Leave a comment »